Amalfi, joya enclavada en el espectacular marco de la Costa Amalfitana, es depositaria de numerosos tesoros de incalculable valor arquitectónico, artístico, histórico y cultural. Hoy te hablamos del Palacio San Benedettoun edificio que cuenta siglos de historia, entrelazando su evolución arquitectónica con los acontecimientos de la ciudad. El palacio de San Benedetto, actual sede municipal, fue fundado en 1580 como“Monasterio de Mujeres Nobles” de la Santísima Trinidad.
Orígenes monásticos:
Su fundación surgió de la necesidad de reunir en un solo complejo a monjas de otros complejos benedictinos que se estaban desmantelando, por lo que nació como parte de un monasterio benedictino femenino.
“...en una época en que la República de Amalfi estaba en la cima de su poderío marítimo, la vida religiosa desempeñaba un papel fundamental en la sociedad. El monasterio, dedicado a San Benito, acogió a monjas de noble linaje y contribuyó a estrechar los lazos entre las familias aristocráticas y la Iglesia…“
Características:
La estructura se caracteriza por capillas laterales que albergan altares, pinturas y estatuas. El presbiterio tiene forma rectangular y está adornado por un tosello de estuco con dos pinturas superpuestas. En el siglo XVIII, la iglesia sufrió una actualización estilística de estilo barroco. El vestíbulo conserva el presbiterio con los “jellies” para ocultar a las monjas. Un bonito suelo de baldosas, y el coro de las monjas con bancos de madera.
La transformación a través de los siglos:
Con el declive de la República Amalfitana, las instituciones religiosas también empezaron a sufrir cambios. En el periodo posterior a la unificación, el monasterio fue perdiendo su función original y el conjunto arquitectónico se transformó, adaptándose a las nuevas necesidades civiles. Sólo en las primeras décadas del siglo XX, tras diversos acontecimientos, se convirtió en el Ayuntamiento.
Hoy, el Palacio se prepara para acoger las obras de “restauración de la fachada deseada por la administración municipal dirigida por el alcalde Daniele Milano, que incluye la recuperación de las yeserías y la restauración del panel de mayólica de Diodoro Cossa colocado en la pared que da al mar…“
El Palacio San Benedetto representa hoy un símbolo de la capacidad de evolución de Amalfi.